domingo, 5 de septiembre de 2010


Cada vez que agarro la cámara de fotos tengo que hacerlo a escondidas de Lucio. A no ser que esté dispuesta a prestarle la cámara, cosa que pasa cada vez mas seguido. Bueno, ayer fue el caso. Lindo sol, trabajos en el jardín, los chicos jugando a hacer túneles y caminos en la tierra para los autos y a mi se me ocurre sacar unas fotos. No saqué muchas, en cambio Lucio se lució con la cámara. Juro que no retoqué ni reencuadré ninguna foto. Todas de él, casi 4 años, el mundo visto a 1,05 mts de altura...